2 de septiembre de 2012

Siempre fui ermitaña, me gusta estar sola y hacer las cosas solas. Creo que así me puedo definir también como una persona independiente, no necesito de otros para vivir ni ser feliz, soy feliz cuando encuentro el bienestar conmigo misma, cuando mi cuerpo y alma se ponen de acuerdo y están bien. Prefiero el silencio que el ruido, prefiero callar que hablar, prefiero una sonrisa que una carcajada, prefiero ser reservada a que todos lo sepan, prefiero mi mundo que el mundo de todos, prefiero ser fría que amorosa. Prefiero lo que todos no prefieren y eso, me hace diferente y simple.